En el mes de Julio del año pasado disfruté de unos días en el Valle del Tena, zona donde suelo ir en cuanto dispongo de unos días libres, dentro del valle, uno de mis rincones preferidos son los Ibones de Anaye
t.Unos días antes de tener que volver al trabajo, empezó a cambiar el tiempo comenzando a aparecer nubes que llegaban desde Francia, así que decidí no regresar sin volver a visitar "mi rincón", así que al día siguiente a las 3 de la madrugada cogía el coche para dirigirme hasta el Corral de las Mulas, cuando abandone el coche el cielo estaba estrellado, pero según subía hacia los ibones se iba cubriendo de nubes procedentes del cercano Valle D' Ossau, 
por experiencia se que las montañas hacen de barrera que retienen las borrascas que provenien de Francia.
por experiencia se que las montañas hacen de barrera que retienen las borrascas que provenien de Francia. El Pico Anayet se encuentra en el vértice de los 2 valles Tena y Ossau y es bastante frecuente cuando uno madruga, encontrarse con el Anayet cubierto por las nubes y al mismo tiempo iluminado por los primeros rayos de sol que sale por detrás de los Picos del 
Infierno, pasando por debajo de las nubes, y eso es lo que esperaba encontrarme. Un poco antes de amanecer llegue al Ibón superior de Anayet, lo que me dio tiempo para sacar la cámara y el trípode, e ir buscando un encuadré, mientras las primeras luces empezaron a hacer acto de presencia, que al principio dan al cielo ese tono magenta, como la luz pasaba por debajo de las nubes, estas potenciaban el color reflejándose en el agua del ibón y de los pequeños arroyos que desembocan en él, al fondo el majestuoso Midi D'Ossou medio cubierto, ese momento duró solo unos se
gundos posiblemente menos de 2 minutos, como ya conocía la zona inmediatamente me vino a la mente el encuadre que quería hacer y que ya había trabajado anteriormente, corrí a posicionarme en la confluencia de los 2 arroyos, compuse para que el arroyo de la derecha apareciera justo por la esquina derecha conduciendo la vista hacia el ibón y el Midi, para compensar la diferencia de luz entre cielo y tierra utilicé un degradado Lee
de -3 pasos de transición fuerte, opté por una apertura f/11 que me da suficiente profundidad de campo con la máxima calidad de la lente 24-105 y enfoqué un poco por delante del borde de la hierba donde se unen los 2 arroyos que calcule que aproximadamente sería la hiperfocal, como la luz todavía era escasa
el tiempo de exposición fue de 30 segundos a ISO 100, solo tuve tiempo de sacar uno toma, pues al elevarse el sol, los rayos pasaban por encima de las nubes que seguían apareciendo, así que me volví para el Anayet y comencé a componer con el ibón y el pico al fondo.
Infierno, pasando por debajo de las nubes, y eso es lo que esperaba encontrarme. Un poco antes de amanecer llegue al Ibón superior de Anayet, lo que me dio tiempo para sacar la cámara y el trípode, e ir buscando un encuadré, mientras las primeras luces empezaron a hacer acto de presencia, que al principio dan al cielo ese tono magenta, como la luz pasaba por debajo de las nubes, estas potenciaban el color reflejándose en el agua del ibón y de los pequeños arroyos que desembocan en él, al fondo el majestuoso Midi D'Ossou medio cubierto, ese momento duró solo unos se
gundos posiblemente menos de 2 minutos, como ya conocía la zona inmediatamente me vino a la mente el encuadre que quería hacer y que ya había trabajado anteriormente, corrí a posicionarme en la confluencia de los 2 arroyos, compuse para que el arroyo de la derecha apareciera justo por la esquina derecha conduciendo la vista hacia el ibón y el Midi, para compensar la diferencia de luz entre cielo y tierra utilicé un degradado Lee
de -3 pasos de transición fuerte, opté por una apertura f/11 que me da suficiente profundidad de campo con la máxima calidad de la lente 24-105 y enfoqué un poco por delante del borde de la hierba donde se unen los 2 arroyos que calcule que aproximadamente sería la hiperfocal, como la luz todavía era escasa
el tiempo de exposición fue de 30 segundos a ISO 100, solo tuve tiempo de sacar uno toma, pues al elevarse el sol, los rayos pasaban por encima de las nubes que seguían apareciendo, así que me volví para el Anayet y comencé a componer con el ibón y el pico al fondo.Según iba avanzando la mañana los claros iban haciendo acto de presencia, con una calidad de luz estupenda que resaltaba los relieves del imponente Anayet, no di por terminada la estupenda sesión que la mañana me había deparado, sin pasarme antes por el ibón inferior donde nuevamente dirigí mi atención hacia el Midi D'Ossau cubierto parcialmente por las nubes que se reflejaba en las tranquilas aguas del lago.
